Quedan solo unos días para Navidad y este año os proponemos que elijáis celebrar unas Navidades Sostenibles.
Es época de celebraciones, pero celebrar no significa despilfarrar. Todo lo contrario, podemos pasarlo muy bien sin vaciar nuestros bolsillos ni diezmar los recursos naturales.
¿Te apuntas a vestir estas fiestas con un traje ecofriendly?
Con estos pequeños gestos también podremos cuidar del medio ambiente en Navidad.
El árbol de Navidad
¿Natural o artificial? El natural es 100 x 100 biodegradable y durante su crecimiento captura CO2. Recomendamos adquirirlo en viveros con producción controlada y devolverlos al acabar las fiestas al servicio de recogida del ayuntamiento para que lo replanten, si sigue vivo, o lo conviertan en compost si no.
Los árboles artificiales están fabricados con PVC, vienen de muy lejos y su transporte ocasiona emisiones de CO2. Además, no se descomponen de forma natural y debemos llevarlos al punto limpio cuando queramos deshacernos de él.
El Belén
Se puede reutilizar una y otra vez completándolo cada año si se quiere con una nueva figura. Cámbialo de sitio o dispón su configuración de otra forma y tendrás siempre un Belén diferente.
Si este año es la primera vez que lo pones, intenta fabricarlo con materiales reciclados y busca la colaboración de toda la familia.
¡Ojo con el musgo! Está protegido en los espacios naturales y sólo puede adquirirse en los viveros autorizados. porque es algo así como los cimientos del bosque.
Luces navideñas
Una de las opciones más ecológicas es la utilización de luces LED que gastan un 90% menos de energía que las tradicionales. Limita las horas de encendido y sólo para los momentos especiales.
Adornos
Los viejos adornos, como las bolas, se pueden pintar y forrar, dándoles una nueva vida. También puedes fabricar tu decoración navideña con materiales reciclados como papel, cartulinas, palomitas y algodón para hacer guirnaldas.
Regalos
Piensa en hacer regalos sostenibles, especialmente a los niños, así conseguirás transmitirles una conciencia ambiental desde pequeños.
Cuando escribas la carta para Papá Noel y los Reyes Magos, recuérdales que los juguetes mejor con baterías recargables y no con pilas; de artesanía local, que sean duraderos, didácticos, que infundan a los niños la importancia de la conservación del medioambiente y que cumplan con los certificados de la Unión Europea en cuanto a responsabilidades ecológicas.
El menaje
Para apostar por unas navidades sostenibles, utiliza la vajilla, la cristalería y la cubertería de toda la vida. Si te decantas por un menaje desechable que sea ecológico. Crea tus propios centros de mesa y coronas con papel cartón, envoltorios, corchos de botellas y combínalas con hojas secas, piñas, bolas navideñas… Los manteles y servilletas de tela, son lavables y se pueden utilizar en más ocasiones.
El menú
Realiza una lista y compra lo necesario para no generar desperdicio alimentario. Reutiliza los alimentos sobrantes, existen cientos de recetas que te ayudarán a reaprovecharlos. Compra productos ecológicos y de proximidad, Kilómetro 0, que no han tenido que viajar mucho para llegar a tu mesa.
En cuanto al postre, no pueden faltar los Turrones Picó ni los dulces tradicionales de tu zona.
Cocina con criterio
A la hora de cocinar primero el microondas, después la olla a presión y por último el horno. Utilizar el microondas en lugar del horno ahorra entre el 60 y el 70% de energía, además de mucho tiempo. No abras el horno mientras esté en funcionamiento o perderás más del 20% de la energía acumulada en su interior.
Las placas de inducción son más rápidas y eficientes que el resto de vitrocerámicas convencionales, consumen un 20% menos de electricidad. Cocina utilizando las tapas de los recipientes, ahorrarás hasta un 25% de energía. Elige ollas y sartenes que tengan las mismas medidas que tu vitrocerámica, así evitarás que se escape el calor.
Recicla
Una vez que acaben las fiestas llegará el momento de recoger, guardar los adornos y deshacerse de todos los desperdicios.
Para celebrar de verdad unas navidades sostenibles no debes bajar la guardia al acabar. Lo que todavía tenga una segunda vida se puede guardar para futuras ocasiones y lo que haya que tirar hay que fijarse en qué contenedor se deposita.
Los cartones y el papel van al azul; los embalajes de plástico, al amarillo; las botellas de vidrio, al verde; las pilas gastadas, al de las pilas… Las guirnaldas luminosas hay que llevarlas a un punto limpio.
En cuanto a los juguetes, si tenemos algunos en desuso lo mejor es hacer que sirvan para otros niños; donárselos a familiares, vecinos, amigos, colegios, guarderías, hospitales, ONG y parroquias.
Ahorro energético
Cierra bien la nevera y no introduzcas alimentos muy calientes que hagan que el frigorífico consuma más para enfriar. Para lavar los platos siempre es mejor utilizar el lavavajillas que fregar a mano, porque se gasta menos agua y energía. El lavavajillas siempre debe estar lleno y utiliza programas cortos o ecológicos. Si necesitas aclarar la vajilla antes de introducirla en el lavavajillas, utiliza siempre agua fría.
Estas son nuestras 10 propuestas para celebrar unas Navidades más sostenibles. Seguro que a ti se te ocurren algunas más. ¿Nos las cuentas en los comentarios?
¡Felices Fiestas!