Agosto es sinónimo de playa y de relax para muchos, pero en Turrones Picó es tiempo de recolectar almendras.
Nos ponemos el sombrero de paja y bajamos al campo, donde nos esperan los almendros listos para que recojamos sus frutos.
La maduración de las almendras depende de su variedad pero nosotros elegimos la Marcona, cuyo momento óptimo de recolección es durante estas semanas de agosto.
Los almendros presentan un follaje verde intenso y la corteza exterior de las almendras se abre facilitando que el fruto caiga al suelo.
Atrás queda la imagen de la floración y su característica tonalidad blanca y rosácea.
La recolección, aunque ha evolucionado, sigue teniendo en Jijona un carácter bastante tradicional y, sobre todo, familiar.
Es un trabajo que reúne a varias generaciones en el campo, donde lo habitual es refrescarse con el botijo y compartir un almuerzo sencillo a la sombra.
La recogida de la almendra cuenta con su propia banda sonora: el canto de la cigarra, que va elevando el volumen según sube el termómetro.
‘Fer ametla‘ (en valenciano) supone una tradición en nuestra cultura mediterránea, pues el cultivo del almendro se inicia en España hace más de 2.000 años en las zonas costeras.
La imagen más repetida es la de extender dos redes en el suelo alrededor del árbol (separadas por el tronco ) y golpear las ramas con una caña o una vara larga. Es lo que llamamos varear.
Una vez que las almendras han caído, los más pequeños de la familia recogen a mano las que haya salido fuera de la red y se pasa al siguiente árbol.
Posteriormente, las redes se vacían en sacos, eliminando hojas o pequeñas ramas y las almendras se almacenan listas para el proceso de descorfar (limpieza de la corteza exterior).
Después la almendra seleccionada se descascara, algo que para nosotros es emblemático.
En todos está la imagen del fundador de Turrones Picó, Antonio Picó Mira, con la maza en su mano, que ilustra el envoltorio de algunos de nuestros mejores turrones.
Una imagen de tradición y respeto por la almendra de la que nos sentimos muy orgullosos.