Hoy queremos hablaros de una delicia un tanto desconocida: los barquillos de turrón para helados.
Decimos que son desconocidos porque su papel es secundario. Viene a ser como ese papel de las películas en el que el amigo o amiga del protagonista parece que no está pero sin el que la trama no tendría sentido.
Esa es la función de nuestros barquillos rellenos de turrón. Es cierto que muchos nos los comemos solos. Están deliciosos y no sabéis el juego que nos dan para picar entre horas aquí en la fábrica de Turrones Picó.
Pero, sin duda, alcanzan su máxima expresión acompañando un buen helado artesano ??.
Está a punto de llegar la primavera, y con ella empiezan a alzar la persiana la mayoría de heladerías artesanales de nuestro país.
No hay helado que se precie que no suba de categoría si comparte copa con un par de barquillos de turrón.
Reconocemos que hay un bajo porcentaje de personas que descartan el barquillo: lo apartan o se lo dan al que tienen al lado. De hecho, hemos lanzado una encuesta en Instagram y un 12% de la gente los deja frente al 88% que nos los tomamos encantados de la vida.
Esta aplastante mayoría aprecia ese toque crujiente que aporta textura y consistencia a la cremosidad de un buen helado.
Nuestros favoritos son los barquillos rellenos de turrón, porque combinan bien con casi todos los sabores, pero los barquillos rellenos de chocolate también están sublimes ?.
Vosotros, ¿qué hacéis normalmente, los quitáis o los devoráis?
Os leemos en comentarios!
